Jack London: Por un bistec

   



   Por un bistec es un cuento triste, social y emotivo, un canto a la caída del vencido, un homenaje al que sufre para sobrevivir. Es un relato de boxeo, con un buen número de páginas dedicadas a un combate entre un viejo púgil que se presenta a la lucha irremediablemente hambriento y un joven sobrado de fuerzas y de deseos de victoria y fama que no desfallecerá por muchos golpes que reciba. Insiste London en dos o tres ideas a lo largo del relato para que calen hondo en el lector, para que no le queden dudas de cuál es el mensaje, y a mí me parecen muy bien esa transparencia y esa reiteración que acercan a la historia a lo poético, a la verdad honda de las palabras: es un recurso habitual en el escritor estadounidense que, partiendo de la creación más elaborada literariamente hablando le permite ser más claro y directo pero sin abandonar un halo de delicadeza y de cercanía con el lector que dota siempre a sus relatos de algo que podríamos llamar la sinceridad de los mejores clásicos, que reposan en un lugar que es como el nacimiento de un río, enteramente puro, claro y saludable, generador y regenerador y casi salvífico.