... era un tipo raro, aunque se da bastante a menudo, un tipo de hombre no solo ruin y corrompido, sino también estúpido, pero de esos estúpidos que saben arreglar muy bien sus asuntos económicos, y nada más que estos, a lo que parece.
Fiódor M. Dostoievski: Los hermanos Karamázov
(traducción de José Laín Entralgo)